Es posible que seáis uno de los muchos propietarios de web o blog que haya instalado un contador de visitas y de lecturas en sus publicaciones. Os interesa saber cuántas personas están leyendo vuestros textos de verdad y si realmente están llegando al público o no. Por ello, confiáis en ese flamante nuevo contador que habéis puesto. Pero… ¿Funciona? ¿Por qué no coincide con los resultados de Google Analytics?
La respuesta rápida es porque los contadores de visitas realmente no son tan precisos como podríais imaginar. Su margen de precisión es más bien reducido, porque no solo tienen en cuenta accesos reales, sino otro tipo de consultas que se realicen a los contenidos. También se contabilizan accesos temporales e impresiones en vez de usuarios únicos y lecturas globales que hagan de la web.
Hay muchos parámetros que tienen peso a la hora de hacer la contabilización de las visitas y las impresiones. Por lo general, entre las visitas que se contabilizan con el plugin que hayáis instalado de revisión de lecturas y las que quedan registradas a través de Google Analytics suele haber una diferencia de 3-1 o de 4-1. Eso significa que las aplicaciones de contador suman una cantidad muy superior de impresiones a las que registra Google Analytics, herramienta en la cual se tienen que cumplir una serie de objetivos para que se contabilicen los accesos.
Resumiendo, y aunque no queremos quitar mérito a los plugins para contabilizar impresiones o visitas, lo cierto es que al final para lo único que os van a servir es como efecto placebo. Muchas veces los datos que os darán no tendrán ni pies ni cabeza porque no están siendo tan reales como parece y, al final, lo que vale es lo que diga Google. Por ello, no carguéis el servidor con contadores: no los necesitáis.